La vida de Caravaggio, llena de rocambolescas historias, no pudo culminar de otra manera que con su muerte abandonado y enfermo de disentería. Meses antes del desenlace pintó este David con la cabeza de Goliat, obra que se considera tradicionalmente la última que realizó. Tenemos en este caso una clarísima reseña autobiográfica del pintor, que en los últimos años había pasado por momentos terribles. Acusado de homicidio, se vio obligado a huir de Roma. Después de pasar por diferentes lugares, recaló en Malta, donde la Orden de los Caballeros de Malta le dio refugio, trabajo y le nombró caballero. Descubierto su delito, fue apresado y Caravaggio escapó, vagando de ciudad en ciudad. A finales de 1609 prepara su regreso a Roma y bien pudiera ser que mediante este lienzo tratara de atraerse el perdón del papa. En el cuadro se autorretrata con el rostro maltratado (una pelea le había deformado), en la cabeza cortada de Goliat. El joven David la contempla conmiserativamente, sin afán vencedor. En su espada se lee una inscripción que identifica a David con la Humildad, y a Goliat con la Soberbia. Se trata pues, de una humillación de Caravaggio ante la autoridad, hecha con el ánimo de suplicar el perdón y poner fin a su destierro, pues si volvía a Roma sería decapitado por homicida. El tratamiento del lienzo es, como siempre en Caravaggio, impactante. La cabeza recién cortada no parece viva ni muerta y la idea de autorretratarse como un muerto es ciertamente inquietante, aunque no debemos olvidar que probablemente su intención no fuera morbosa sino diplomática. http://www.artehistoria.jcyl.es/obrmaestras/obras/2395.htm
David con la cabeza de Goliat
Caravaggio (1609-1610)
Encargante: cardenal Scipione Borghese
Ubicación: Galería Borghese, Roma
Estilo artístico: arte barroco
Técnica: óleo sobre lienzo
Dimensiones: 125×101 cm.
Autorretrato: La cabeza decapitada de Goliat es en realidad un autorretrato de Caravaggio. No es un hecho casual, ya que tenía una terrible obsesión con las cabezas cortadas, y él mismo pensaba que iba a morir así. Probablemente esas teorías que construía acerca de su muerte se debieran a su complicadísimo carácter, que le llevaba a agredir severamente a todo aquel que criticara su obra o su persona, especialmente a pintores jóvenes.
Tenebrismo: Si por algo destaca Caravaggio, además de por el realismo de los representados, es por el tenebrismo de sus obras, característica que influyó posteriormente en otros grandes de la pintura como Diego Velázquez o José de Ribera. En muchos de sus lienzos el foco lumínico se proyecta en los personajes de tal modo que el contraste entre la sombra y la luz es totalmente vehemente, como podemos apreciar si vemos el cuerpo de David o la testa del gigante.
Última: Algunos especialistas sostienen que la obra fue realizada en el período 1605-1610 y otros precisan más diciendo que corresponde al período 1609-1610. Es esta última teoría la que toma más fuerza actualmente, e incluso se conviene en afirmar que este lienzo es el último que pintó Caravaggio, probablemente en un intento por obtener el perdón del papado para así volver a Roma, ciudad que había tenido que abandonar por haber asesinado a un hombre en una riña provocada por un partido de tenis.
Clemencia: La mirada que David lanza a la cabeza de Goliat, la cual sostiene en su siniestra, no refleja ni mucho menos un gesto de ufanía por su acción homicida. Casi que se podría decir que la mirada es compasiva, lastimosa, mostrando cierta sensibilidad y magnanimidad ante la cabeza, cuyo rostro acierta a representar lo hórrido de una decapitación, aunque tampoco llega a alcanzar cotas extremas su expresión.
Andrógina: Un rasgo característico de muchos personajes masculinos representados por Caravaggio se puede apreciar en sus rostros, los cuales parecen sufrir cierto amaneramiento. Dos hipótesis apoyan esta androginia de los muchachos. La primera nos lleva al pensamiento de importantes filósofos helenos como Platón, quienes hablaron de la androginia como perfección causada por la integración de hombre y mujer en un mismo ser. Mas la segunda teoría nos lleva a la vida privada del propio Caravaggio, acusado de homosexualidad en su época, aunque actualmente se discute mucho este asunto.
Tema: Éste no es el único lienzo que Caravaggio dedicó a la pugna entre David y Goliat. Años antes pintó dos representaciones más de ambos personajes, siendo en todos los casos la cabeza de Goliat un autorretrato del pintor italiano. Así mismo, la obsesión por las decapitaciones es una constante en la obra caravaggiesca, con ejemplos anteriores como La cabeza de la Medusa, Salomé con la cabeza de San Juan Bautista o Judith y Holofernes.http://arte.observatorio.info/2008/08/david-con-la-cabeza-de-goliat-caravaggio-1609-1610/
Interesante, no me había percatado el autorretrato de Caravaggio en la cabeza de Goliat. Increíble toda la historia que viene detrás de este cuadro. Me gustó!
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